Son muy pocas las veces en las que elijo a una película por su cartel. Y éste fue el caso: la fotografía de Dustin con John Voight me cautivo a primera instancia. Sé muy bien que los elementos son minimalistas sin embargo despertó en mí la curiosidad de descubrir el contenido del filme y me llevé una grata sorpresa.

Comenzamos con la historia de Joe Buck -(John Voight), un tejano vestido a la John Wayne que tiene anhelos de convertirse en un gran gigoló en New York pues a su ver la ciudad está llena de maricas que no satisfacen adecuadamente a las damas, un mercado libre para un prostituto. Y así se despide del asfixiante trabajo de mesero, viste elegante y parte hacia la gran manzana. En éste trayecto es importante analizar los flashback que el personaje tiene, aparentemente Joe Buck fue criado por su abuela que era una prostituta lo cual puede justificar ése complejo machista. Por otro lado observamos a un Joe sorprendido en su automóvil por una manada de salvajes mientras intimaba con una jóven con aparente problemas mentales, la cual es brutalmente violada mientras que Joe es testigo de dicho acto sin poder hacer algo. Recoger los fragmentos a lo largo de la película nos ayudará a darle sentido a la vida de Joe, ya que en ningún momento se nos explica su verdadero pasado.
Joe ya se encuentra en la ciudad. Progresivamente el vaquero se da cuenta que las personas son muy diferentes, que la calidez humana en las urbes es paupérrima y que la clientela no es fácil de encontrar. Nuestro pobre amateur con poco dinero en los bolsillos e instalado en un hotelucho, decide ir en busca de presas. Su caminata es extensa hasta que por azar del destino se encuentra con una rubia cosmopolitá, que con indiferencia lo invita a su departamento. La conclusión del acto es terrible y Joe no gana ni un céntimo.

Decepcionado Joe entra a un bar es aquí donde conoce a Rizzo . un tuberculoso indigente con aires de proxeneta interpretado por el grandísimo Dustin Hoffman. A partir de éste momento Joe entabla una relación con Rizzo, el cual le hace ver que si en verdad quiere éxito en su profesión necesita un agente que lo organice. Claro está que todo esto fue un engaño y sólo provoca que Joe vaya al departamento de un lunático homosexual. Ahora Buck se encuentra saqueado y asqueado por las perversiones urbanas, está apunto de desistir en sus metas
Rizzo se cruza en el destino de Joe, éste lo ve con furia y le exige el pago del dinero, pero es inútil. Rizzo se siente culpable por lo que lo invita a su “ casa“ que en realidad es la habitación de un edificio abandonado. A partir de aquí las experiencias entre los dos perdedores comienzan. Rizzo se convierte en el supuesto agente de Joe. El prostituto se da cuenta de que Rizzo está en un estado de salud muy devastador y la forma en que habita es realmente insalubre. Conforme el tiempo pasa numerosos proyectos y sueños surgen en la mente de los personajes los cuales no tardan en terminar de forma abrupta, cruel y desmotivante.
La conclusión de la historia es conmovedora y a la vez predecible. Lo más atinado del filme son las actuaciones, un verdadero gozo el observar a éstos dos titanes del cine. Lo otro y que me parece igual de interesante, es la forma en que se presenta a una sociedad podrida, cruel y asqueada de sí misma.
Acabo de ver la película hoy y justo hace unos días terminé de leer el libro.
ResponderEliminarEl libro está dividido en tres partes y sólo hasta la segunda se corresponde en su mayoría con la película.
Obviamente en el libro se dan más detalles de la vida de Joe Buck. Su abuela Sally no era una prostituta, sino una mujer más preocupada por ella misma y sus galanes que por su nieto, quien prácticamente se crió solo. La escena de la violación de Annie no forma parte del libro y a ella se la llevan a un hospital mental cuando sus padres descubren que acostumbra acostarse con los muchachos del pueblo.
Hay en realidad muy pocas diferencias con el libro y las que hay no son muy relevantes, pero sí muy ilustrativas sobre la personalidad de Joe, además de que hablan un poco del pasado de Rico Rizzo.
Esta película siempre que la veo me deja con una sensación de tristeza y preguntándome qué habrá sido de Joe Buck. Y siempre, invariablemente, deseo que haya madurado y encauzado su vida.